Este artista tiene un estilo difícil de defiinir. Se encuentra a caballo entre el siglo XIX y el siglo XX. Aunque siempre se ha hablado de él como un artista postimpresionista observamos en su obra algunas características propias del modernismo, como por ejemplo el interés por plasmar el movimiento tanto en su pintura como en sus carteles.
Tolouse Lautrec era hijo de una familia adinerada de clase noble, así que nunca tuvo problemas económicos. También es cierto que a lo largo de su vida tuvo bastante éxito con sus trabajos que vendía de forma habitual, al tiempo que colaboraba con revistas y locales de la ciudad de París para realizar sus famosos anuncios que animaran a la gente a visitarlos.
Tuvo una vida bastante corta, no llegó a los 40 años. Tuvo diferentes enfermedades, en primer lugar como consecuencia de la endogamia de sus padres, que eran primos carnales. Padecía una enfermedad que impedía el normal desarrollo de sus huesos y que empezó a manifestarse cuando tenía tan solo 10 años. La debilidad d¡que padecía hizo que sufriera dos roturas de fémur algo que le impidió crecer como el resto de los niños. Se quedó en una altura de 1,52 cm. También tenía deformado el rostro.
Ya asentado en París y decidido a ser pintor, tuvo relación con Degás, del cual era vecino. Le influyó mucho en su trabajo, sobre todo con la idea del trabajo en interior. En París Tolouse Lautrec le encantaba la vida nocturna, el ambiente de fiesta que había por la noche en los cabarets, locales de bailes y salas de fiesta. Al mismo tiempo visitaba locales de prostitutas, fruto de ello contrajo la sífilis. También tuvo problemas con el alcohol ya que bebía demasiado y eso le provocaba en ocasiones fases de delirio que eran difíciles de controlar. Fueron varias las ocasiones en que tuvieron que recogerle completamente alcoholizado en la calle.
Frente a los impresionistas que representaban la naturaleza, Tolouse Lautrec prefería los ambientes interiores, iluminados con luz artificial. Representaba a la perfección los gestos de las bailarinas y los comediantes de los locales que visitaba, también observaba a las personas de la alta sociedad que se divertían en estos locales al tiempo que parecían llevar un vida tranquila con su familia. Pensaba de si mismo que era un cronista social. Lo que realmente le interesaba eran las personas, sus reacciones y sus gestos.
Con el fin de promocionar los espectáculos que tenían lugar en estos locales, algunos dueños le contrataban para que realizara carteles que los anunciaban. Tiene una gran capacidad para representar el movimiento de los diferentes personajes. Se dedicó mas a la ilustración que a la pintura, conservamos pocos óleos del artista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario