Esta expresión utilizada por los nazis al poco de llegar al poder. Se refiere a una exposición organizada por los nazis y de la que se han cumplido hace poco 80 años de su celebración. Se trataba de una serie de obras que al régimen le resultaban incómodas ya que eran símbolo de la decadencia y, en algunos casos, un símbolo de degeneración.
Este tipo de arte no combinaba muy bien con el estilo que le gustaba imponer al régimen nazi, se trataba de obras demasiado modernas. Según decían no exaltaban los nuevos valores del régimen recién impuesto. Los gustos de Hitler y sus secuaces estaban más ligados al exaltar los valores del país a través del realismo, en un neoclásico revisado.
Resulta curioso que la exposición organizada bajo el nombre de "arte degenerado" no tenía otra pretensión que adoctrinar al pueblo. Hoy en día todas esas obras se aprecian como grandes clásicos de la modernidad. Algunos de los artistas que formaban parte de la exposición son algunos de los más importantes creadores del siglo XX como Paul Klee, Kandinsky, Edward Much o Marc Chagall.
Es curioso pero el elemento de propaganda llegaba a la colocación de los 600 cuadros que formaban parte de la exposición. Estaban colocados todos muy juntos, sin espacios para respirar, algunos de ellos torcidos o mal colgados. Al tiempo se mostraban dibujos realizados por enfermos mentales o se mostraban fotografías de personas con deformidades físicas. Para completar la exposición los cuadros se acompañaban con cartelas que incluían comentarios sarcásticos sobre aquello que se representaba.
Dentro de este arte degenerado se incluían algunos de los estilos más representativos del siglo XX, por ejemplo el cubismo, dadaismo, fauvimo, impresionismo, surrealismo o expresionismo. Aunque hay que decir que este último fue motivo de controversia. El expresionismo es un movimiento genuinamente alemán. Como disculpa alguno de los jefes del movimiento nazi dijeron que era un movimiento nórdico y así se justificaban un poco.
Esta exposición tenía su contrapunto en otra en la que se mostraban cuadros que se adecuaban a los gustos del régimen que exaltaran los valores de la historia alemana y sus gentes.
Es curioso pero eso me ha recordado algunas exposiciones que se han hecho en contra del arte contemporáneo. Por ejemplo asistí a una en Salamanca que se oponía a lo que se hacía en el centro de arte contemporáneo y se llamaba "figuraciones nuestras" e incluía solo cuadros figurativos principalmente de artistas locales. Fue el hazmerreir del mundo del arte.
La exposición de "arte degenarado" comenzó en Munich. Luego fue trasladada a otras ciudades alemanas y austriacas para así "educar" a un público fácil de manejar en torno a las ideas nazis. Ello llevó a que cerca de 20.000 obras de este estilo salieran en muchos casos compradas en el extranjero o bien tuvieron como destino la hoguera. En 1939 se quemaron más de 1000 obras en Berlín acompañados de multitud de grabados.
La exposición también se presentaba como el despilfarro que había empleado el gobierno anterior a los nazis en obras que no merecían la pena mientras mucha gente lo pasaba más después de la crisis del año 1929. Vamos populismo barato aprovechando las necesidades de la gente y tocando sus sentimientos para conseguir un objetivo. Parece uno de los primeros ejemplos de posverdad a la que tristemente estamos tan acostumbrados en la actualidad.
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