El videoarte es una de las disciplina más demandadas desde su aparición en los años 60. Actualmente es uno de los medios de expresión más populares debido al avance de la tecnólogía primero electrónica y luego digital. Su versatilidad y fácil manejo lo hacen muy accesible para todo tipo de público.
El nacimiento del vídeo como expresión artística tiene lugar en Estados Unidos a principios de los sesenta. Es un momento en que la televisión y el cine lo dominan todo. Allí empiezan a aparecer los primeros equipos portátiles de vídeo y la posibilidad de grabar algunas grabaciones que por intereses de los medios de comunicación, no eran reflejados por ellos.
En 1961 Nam June Paik y Wolf Wostell fundan el movimiento Fluxus. Aquí encontramos los orígenes del videoarte. Ellos se basaban en la apropiación de objetos, hechos y signos de la vida cotidiana. Una estética dadaista que encuentra en el videoarte un nuevo medio de expresión, pudiendo combinar y manipular imágenes a su gusto.La función comercial de la televisión permite al videarte separar la función comercial de la función crítica. Se graban performance, happenings y otras expresiones artísticas que no tenían cabida en la televisión.
En 1965 la marca Sony lanzó al mercado su primera unidad de vídeo portátil llamada Portapak, consistía en una cámara de vídeo y un magnetoscopio y permití el acceso popular a esta nueva disciplina. Nam June Paik fue uno de los primeros en adquirir el modelo en 1965. Una de sus primeras grabaciones fue situado en la parte trasera de un taxi reflejó la visita del Papa Pablo VI a Nueva York. La cinta fue mostrada esa misma noche en un café fe Grenwich Village en Nueva York, anunciado por el artista por medio de octavillas, donde auguraba un futuro maravilloso a esta nueva disciplina artística.
Otros artistas verán en el video una nueva forma de expresión que complementa su campo de actuación, que puede ser el baile, la danza, el teatro o las artes plásticas. Otro grupo pretende documentar la realidad política y social de la época, apartándose como hemos dicho de la parte comercial e intereses empresariales de las marcas o medios.
Durante los años 70 buena parte de las grabaciones tendrán el cuerpo como protagonista, jugado con diferentes cámaras que nos ofrecen varios planos de la misma escena.
Si en principio el vídeo tiene una simple función de registro, poco a poco gracias al montaje y edición iremos acercándonos más a lo que entendemos por una creación artística.
El avance de la tecnología permitirá una rápida difusión de esta disciplina, por ejemplo la introducción del VHS en 1976 o el perfeccionamiento del vídeo en color. Ello ha llevado, sobre todo en las décadas de los 80 y 90 a consolidar el videoarte como una de las principales disciplinas, buscando la implicación del espectador, esperando una reacción por su parte al observar la obra, abandonando la frontalidad que tenía cualquier obra de arte.
Desde el año 2000 tenemos una nueva masificación con la llegada de la era digital. Actualmente cualquiera con su propio teléfono puede grabar y editar vídeo con suficiente calidad. El ritmo actual es difícil de seguir en algunos casos.
Muchas de las obras de videoarte tienen interés en los problemas que aquejan a la sociedad contemporánea. Temas que no son tratados desde otros ámbitos artísticos y que encuentran en el vídeo su principal medio de difusión. En algunos casos los vídeos se aproximan al documental que busca la reflexión del espectador sobre ciertos problemas de la sociedad.
Uno de los trabajos de Bill Viola |