La historia de la fotografía está salpicada de pequeños avances que hacen a sus autores originales. El caso que hoy nos ocupa es una de ellos, ya que lo que hace Claude Cahun es adelantarse a su tiempo para crear un debate que está más cerca del arte contemporáneo que de las décadas de los años 30 o 40 que fue cuando principalmente trabajó.
De hecho su obra fue expuesta por primera vez en el año 1992 y desde entonces se la reconoce como una precursora de uno de los temas que más se tratan en la actualidad, hablamos del tema del género y de la identidad.
Todo es su obra es bastante ambiguo, en primer lugar su nombre (que no era el verdadero porque a ella la llamaron Lucette Schow cuando nació en la ciudad francesa de Nantes en 1894). Pero se hacía llamar a si misma Claude Cahun. Este nombre Claude es ambiguo porque podemos utilizarlo igualmente para un hombre o para una mujer, esa es la duda que quiere transmitir la artista, como vemos no solo en su obra sino en su propio apelativo.
Su trabajo está básicamente centrado en si misma, representa retratos propios disfrazada en diferentes lugares y situaciones, la mayoría de las ocasiones como un hombre, jugando con el tema de la identidad. Ella se reclama a si misma como un ser diferente, independientemente de si se trata de un hombre o de una mujer.
Tuvo relación con el grupo de surrealistas, pero nunca la consideraron como una artista, eran demasiado machistas para ello, solamente se fijaban en ella como musa para sus creaciones y no como una persona capaz de crear cosas nuevas. Era una mujer y eso no era suficiente tarjeta de presentación en aquel momento.
En su trabajo podemos observar como se disfraza, se maquilla con la idea de representar a diferentes personajes, tanto que es muy complicado hacer una diferenciación entre hombre y mujer en sus obras. Ella no paraba de experimentar con su rostro y su cabeza, siempre tratando de mostrar su nariz bastante prominente, con algunas máscaras, afeitando su pelo o bien tiñéndolo de diferentes colores como rosa o dorado.
Claude Cahun era de origen judío y con la llegada de los nazis a Paris fue deportada a la Isla de Jersey junto a su compañera Suzanne Malherne, allí pasó el resto de sus días y continuó con sus experimentos en torno a la identidad hasta su fallecimiento en el año 1954.
Vamos a incluir una fotografía de otra fotógrafa contemporánea llamada Risk Hazecamp. para que podamos observar la influencia de Claude Cahun en uno de los temas que más se tratan en las obras de arte contemporáneo en sus diferentes acepciones. Vemos que los temas son los mismos, disfraces, maquillaje y debate sobre la identidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario