domingo, 1 de febrero de 2015

El Descendimiento de la Cruz de Roger Van der Weyden

Parece que la del artista que nos ocupa hoy será una de las grandes exposiciones en Madrid programadas durante el año 2015 y sin duda este será su cuadro estrella, una obra de grandes dimensiones que se conserva en el Museo del Prado. También encontramos una copia de la misma si visitamos el Monasterio de San Lorenzo de Escorial disfrutando de sus diferentes salas.


Roger van der Weyden es un artista flamenco, concretamente de la norte de Bélgica. Su vida artística coincide con la primera mitad del siglo XV, ya que nació en el año 1400 y falleció en 1464 en la ciudad de Bruselas. Por tanto es un pintor de estilo gótico, si queremos podemos decir gótico flamenco, un estilo de gran influencia en España, no solo en pintura sino también en arquitectura a lo largo de la segunda mitad del siglo XV y el reinado de los Reyes Católicos.
El cuadro se encuentra en España porque el rey Felipe II lo compró a una de sus tías en un viaje a los Países Bajos. Ya sabemos que el rey era muy aficionado al arte y poseía una excelente colección de pintura que fue ampliando a lo largo de su vida.
El tema nos muestra el momento en que Jesucristo es bajado de la cruz, ya muerto, cosa que podemos apreciar por la herida que muestra en el costado su figura que ocupa la parte central de la composición. Justo a Él aparecen una serie de personajes que estarían presentes en la muerte de Jesús acompañándole en ese momento. Entre ellos dos ancianos, Nicodemo y José de Arimatea, que sería el dueño del sepulcro donde se deposita el cuerpo de Jesús. El personaje más joven lo identificamos con Juan Evangelista, presente en la escena y al cual reconocemos porque todavía no tiene barba debido a su juventud. La Virgen María se ha desmayado, rota por el dolor al contemplar la muerte de su hijo se encuentra en la misma posición que Jesucristo está representado en el cuadro. De las tres mujeres restantes la más fácil de identificar es María Magdalena que se encuentra a la derecha ataviada con un cinturón que representa la virginidad y la pureza.
Destacamos la riqueza de los vestidos y ropajes que llevan cada uno de los personajes que llenan la obra.
Por último no podemos dejar de señalar la expresión de dolor que presentan cada una de las figuras de la obra, sus rostros desencajados y llenos de lágrimas que muestran por ejemplo las dos mujeres de los extremos y que son una de las características principales de la obra. El gótico como un aumento de la representación realista frente al hieratismo románico, un lugar donde los personajes se humanizan y gracias a la línea marcada por el maestro Giotto comienzan a mostrar que sufren y que los acontecimientos les afectan. En ese aspecto Roger van der Weyden es un gran maestro.
No podemos dejar el texto sin aludir al cráneo y hueso que se encuentran en la composición y que tradicionalmente representan los huesos de Adán, el primer hombre que con el peso de la cruz de cristo emerge de debajo de tierra y simboliza el fin de la vieja alianza y el comienzo de la nueva.
Sin duda una de las grandes exposiciones de pintura en Madrid que nos depara el año 2015.

No hay comentarios:

Publicar un comentario