Michelangelo Mesiri es uno de los grandes maestros de la pintura barroca y uno de los introductores del claroscuro en la pintura barroca europea de comienzos del siglo XVII. Sus pinturas sirvieron como modelo a otos muchos artistas que trabajan en la época y que consideraban a Caravaggio como un maestro aventajado en el arte de la pintura.
La muerte de la Virgen es un tema bastante polémico, entre otras razones porque en ese momento la iglesia no tenía definido claramente la manera en que la Virgen muere, existe un tema iconográfico que se llama la dormición de la Virgen que nos indica que la Virgen , libre de pecado moriría sin dolor, simplemente quedándose dormida y que instantes después Dios la volvería a la vida para llevarla al cielo en cuerpo y alama. Aunque también podemos encontrar escritos que nos indican que la virgen no murió sino que simplemente ascendió a los cielos. Esa indefinición plantea problemas a los pintores a la hora de representar este tema.
He hecho la obra de Caravaggio no fue aceptada, entre otras cosas porque era evidente que la persona representada había fallecido y ese, como hemos visto, era un tema no resuelto por la Iglesia Católica en ese momento.
Quizás una segunda razón para no aceptarlo fue que para representar a la Virgen Caravaggio habría usado la imagen de una joven prostituta que se había ahogado en el río Tiber, lo cual planteaba ciertos problemas éticos, acrecentados por la representación de los pies hinchados y el vientre hinchado, como consecuencia del ahogo. Todo ello unido a la evidencia de la muerte.
El uso del claroscuro es fantástico y sobre todo la representación de los personajes, porque, como vemos, Caravaggio se aleja por completo de la representación de figuras idealizadas, para tomar modelos de la calle, compañeros, amigos de taberna, prostitutas que son los personajes que le sirven para componer la obra, alejándose del idealismo generalizado de la pintura italiana para explorar una vena realista que se encontraba alejada del gusto de los mecenas que vivían en las ciudades de aquel país.
Pero esa vena realista será de gran influencia y será recogida por otros pintores como por ejemplo Velázquez o Rubens, gracias al cual conservamos esta obra, ya que al ser rechazada fue comprada por el Duque de Mantua por no poder ser expuesta en la Capilla de Santa María de Scala, su destino original.
María Magdalena se encuentra desolada en primer plano, mientras los apóstoles contemplan atónitos las escena, no con rostros de dolor, sino más bien de pesadumbre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario