miércoles, 15 de junio de 2016

El cubismo en tres simples pasos

El cubismo es uno de los movimientos más revolucionarios de principios del siglo XX y lo asociamos principalmente a Pablo Picasso, aunque fue practicado de una u otra manera por la mayoría de artistas que trabajan en las primeras décadas del siglo XX, ya que el estilo aparece como una referencia para la mayoría de los artistas.


Debemos tener en cuenta en el nacimiento del cubismo el shock que para la mayoría de los artistas supone la irrupción de la fotografía durante la segunda mitad del siglo XIX, muchos retratistas abandonaron la pintura y se pasaron a la fotografía, mucho más perfecta en la ejecución de las obras. ¿Cual era el futuro de la pintura si la fotografía podía representar la realidad de una manera mucho más fiel? La respuesta a esta pintura resulta complicada, pero lo experimentos llevados a cabo por diferentes artistas darán como fruto el surgimientos de diferentes estilos que conocemos con el nombre de vanguardias.
Tres son las grandes características del cubismo, no es que sean nuevas, ya que algunas ya podíamos observarlas en el pasado, pero la mezcla de las mismas hace que el estilo se convierta en original y diferente de lo hecho hasta el momento.
El primer paso del cubismo es la eliminación de la tercera dimensión, es decir en el cuadro se elimina la profundidad y solo se aprecia en el cuadro el ancho y alto, pero da la impresión de que todos los objetos y personas se encuentran representados en el mismo plano.
El segundo paso del cubismo es la simpleza a la hora de representar los personajes u objetos representados en el cuadro. Picasso estaba influido por un par de exposiciones sobre arte africano que pudo observar y también por la nula complicación de la pintura románica a la hora de representar las figuras. Es decir con unas pocas lineas se compone una figura, todo muy simple, nada complicado.
El tercer paso del cubismo será la descomposición de las figuras u objetos para poder ser observados desde distintos puntos de vista. Si la fotografía solo nos ofrece un punto de vista que puede ser por ejemplo frontal, lateral, alto, bajo, en pintura tratan de hacer algo diferente representando diferentes partes del cuerpo de una persona desde distintos puntos de vista, que incluyen también mayor o menor grado de luz. Esta descomposición que empieza por cosas muy pequeñas, terminará invadiendo todo el cuadro hasta llegar a una representación de tan difícil interpretación que se convierte en abstracto.
Estas son algunas de las principales características del cubismo que pueden observarse en la mayoría de los cuadros de este estilo. Como vemos se trata de un movimiento que trata de reaccionar contra la irrupción de la fotografía, tratando de crear algo nuevo, diferente, algo no visto hasta ese momento sobre un lienzo.


Si te apetece ver un vídeo sobre este tema, aquí lo tienes:

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario