Historias de la Biblia para niños: la mujer adúltera

Pieter Van Lint. La mujer adúltera

Continuamos con nuestra serie de Historias de la Biblia para niños, donde ya hemos tratado diferentes temas tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, como los Despososrios de la Virgen o La Matanza de los Niños Inocentes, con la idea de acercar textos del evangelio relacionándolo con grandes obras y autores de la Historia del Arte.

Hoy vamos a tratar un tema del Evangelio que nos habla sobre un episodio que le ocurre a Jesús con una mujer que había sido descubierta cometiendo adulterio. Varios personajes se presentaron con ella delante de Jesús, que se encontraba en cuclillas escribiendo unos símbolos y signos en la arena del suelo. El caso es que con la intención de tentarle y saber si se saltaba la ley para poder acusarlo le preguntaron que qué debían hacer con ella. La ley decía que si una mujer era descubierta en adulterio debía ser apredreada en medio de la plaza por todo el mundo (es curioso que reflexionemos que 2000 años después de esta escena con lo que nuestra sociedad se supone que ha avanzado todavía existen países que condenan a personas que realizan este tipo de actos o bien que son ahorcados porque tienen una opción sexual diferente al resto).

Jesús no les hacía caso y ellos insistieron con la pregunta, de manera que Jesús levantó la cabeza y mirándoles les dijo: "El que esté libre de pecado que tire la primera piedra" y volvió a escribir sobre el suelo. Las personas que habían traído a la mujer comenzaron poco a poco a marcharse tras la frase de Jesús, hasta que al final se quedaron solo Jesús y la mujer, entonce Jesús se levantó y le dijo: "Mujer nadie te ha condenado. Yo tampoco lo hago. Vete y no peques más."

Anton Van Dyck. La mujer adúltera

Hay quien asocia esta escena con María Magdalena, que habría sido condenada por ejercer la prostitución y después de esta escena cambiaría su vida para seguir a Jesús hasta convertirse en una de las pocas personas que se encuentran al pie de la cruz cuando el Cristo falleció, dando un giro completo a su vida tras su encuentro con el Maestro.

Vemos que para representarlo suelen elegir el momento en que Jesús se encuentra escribiendo en el suelo, mientras se presentan delante de él para preguntarle por su opinión sobre el tema, así sucede en las obras de Brueghel y Van Lint. El otro pintor Holandés Van Dyck opta por el momento en que Jesús se dirige a los acusadores para indicarles que si no tienen ningún pecado pueden empezar a tirarle piedras a la mujer.

Peter Brueghel. Cristo y la adultera